El castro tiene forma circular, con unos ejes máximos de 45 por 30 metros. En la parte superior presenta un recinto de unos 30 por 30 metros y, por debajo de este, en su zona norte, un aterrazamento de 15 metros, separado del recinto superior por un desnivel de 4 metros.
En el año 2004, a consecuencia de las obras de ampliación y acondicionamiento de la carretera que rodea el cuatro, se llevó a cabo un trabajo de control arqueológico de las mencionadas obras. Los trabajos dejaron al descubierto varias estructuras murarias (que luego fueron protegidas con xeotextil) y permitieron el registro de abundantes fragmentos cerámicos de buena calidad y cuidada factura (ollas, platos, etc.), muchos de ellos decorados, que proporcionan una cronología del siglo II d. C.
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